CONVERSANDO CON ROSARIO MANZANOS: EL LENGUAJE PERIODÍSTICO EN LA CRÍTICA DE DANZA

Rosario Manzanos, Premio “Criticism and Culture of Ballet” en el XXVIII International Ballet Festival of Miami (IBFM). Fotografía: archivo personal de R. Manzanos (cortesía)

Una de las iniciativas que distinguen al Festival Internacional de Ballet de Miami (IBFM, por sus siglas en inglés), fundado en 1995 por Pedro Pablo Peña (1944-2018) y ahora bajo la dirección de Eriberto Jiménez, es la entrega -desde 2007- de un reconocimiento al logro de toda una vida para figuras prominentes de la crítica y la cultura del ballet.

Como ya es costumbre, el Premio “Criticism and Culture of Ballet” (‘Crítica y Cultura del Ballet, en español) se pone en manos de la personalidad seleccionada al inicio de la gala de clausura del evento, que este año tendrá lugar el domingo 13 de agosto, a las 5 de la tarde, en el Miami-Dade County Auditorium.

En esta ocasión, lo recibirá la reconocida periodista mexicana Rosario Manzanos (Distrito Federal, 1958), que desde 2013 es columnista del prestigioso periódico Excélsior, el segundo diario de más larga trayectoria en la Ciudad de México (su primer ejemplar data de 1917).

Flyer promocional de la IBFM CLOSING GALA OF THE STARS (cortesía del International Ballet Festival of Miami)

Rosario ha colaborado igualmente con otras muchas publicaciones y fue jefa del Departamento de Danza de la Universidad Autónoma de México (UNAM) de 1989 a 1993.  En 2003, recibió el Premio Nacional de Periodismo Cultural Fernando Benítez y en 2017, el Premio Nacional de Danza Contemporánea Jose Limón. Su libro más reciente, una recopilación de entrevistas titulada “Vida al Aire”, será presentado en Miami el viernes 11 de agosto en el Miami Hispanic Cultural Arts Center (MHCAC), como actividad colateral de IBFM.

El público que asista a la presentación podrá hacerle preguntas a Rosario, pero mientras llega ese día, esta versión editada de nuestra conversación -ambos somos platicadores irreprimibles y nos conocemos desde tiempos inmemoriales, usted puede imaginarse- debe servir como un primer acercamiento a sus opiniones sobre el premio, el periodismo cultural y la crítica de danza.

Rosario Manzanos en 1968, durante una clase de danza moderna en la Escuela Nacional de Danza del INBA, México. Fotografía: archivo personal de R. Manzanos (cortesía)

“Este premio”, afirma, “ha venido a resignificar mi trabajo, porque pareciera ser que el campo que ocupamos aquellos que nos dedicamos a la crítica, cuando menos en México, se ha venido reduciendo. La especialización y la meritocracia no son vistos con tan buenos ojos en este momento en el núcleo cultural artístico”.

“Estoy feliz por el premio y salto de alegría”, exclama, “porque además lo comparto con grandes autoridades que, de verdad, yo admiro muchísimo. Además, estando tú entre los premiados, que de alguna forma o de muchas formas o de todas las formas, me abriste el camino para que yo pudiera concebir un marco teórico muy claro y muy específico sobre la danza, ¿te acuerdas? [Rosario se refiere a un curso sobre metodología para la crítica de la danza que tuve el honor de impartir en varias instituciones mexicanas a inicios de la década de 1980]. Hace una pausa y confiesa divertida, “tus mapas categoriales todavía los repaso mentalmente cuando me hacen falta”, e inmediatamente después regresa al asunto que hoy nos ocupa, “recibir el premio es una forma de legitimar mi trabajo como crítica y mi trabajo como una espectadora especializada que pasa la mayor parte de su tiempo siendo observadora de lo que los otros hacen”.

“Esta foto es histórica para mí, con mis dos maestros”, dice Rosario. De izq. a derecha, Rogelio Martínez Furé, Rosario Manzanos y Orlando Taquechel, en el Distrito Federal (hoy CDMX), 1985, durante un Encuentro Nacional de Danza Folklórica organizado por la UNAM. Fotografía: Archivo personal de R. Manzanos (cortesía)

Rosario estudió danza de pequeña [en la Escuela Nacional de Danza del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) en México, donde se graduó como Instructora Especializada de Danza Ballet] y relata que, casi desde el primer día, descubrió su verdadera pasión. “Yo recuerdo verme observando a mis compañeras y me gustaba ver lo que hacían. Desde entonces, me reconozco como alguien que ha estado en la platea viendo lo que sucede y se siente fascinada con los resultados.  Mi fantasía no estaba en ser yo la protagonista de una obra, sino en el gozo que me procura observar lo que los demás pueden hacer”.

Sobre su primer artículo sobre danza, expresa que lo escribió en 1988, pero que “no fue propiamente una crítica de danza, sino un reportaje sobre los ‘sonideros’, una forma popular de baile urbano que existe en México”. Salió publicado en la revista Proceso y fue muy bien recibido. [Rosario fue reportera de la sección cultural de Proceso desde 1988 hasta 2013] “Mi primera crítica, como tal, fue sobre el Premio Nacional de Danza. La segunda fue sobre el Ballet Folklórico de Amalia Hernández.  Ambos fueron trabajos de investigación. Para mí, incluso hacer una nota de 400 palabras implica una investigación de fondo”.

“El lenguaje periodístico es crucial en la crítica de danza”, asegura Rosario Manzanos. Fotografía: Christa Cowrie (cortesía)

“En este momento, a nivel de prensa escrita, yo soy la única persona que hace crítica de danza en México”, responde cuando abordamos el tema de la situación actual de la crítica de danza en su país. “Lo que es para mí una frustración enorme, porque no tengo interlocutores con los cuales pueda discutir. No tengo ese intercambio. Y en los medios digitales no he visto material formalmente realizado en términos de lo que periodísticamente se exige cuando te dedicas a la crítica”.

Considerando que el ejercicio de la crítica de arte no está exento de controversias, se impone la pregunta ¿te crea algún conflicto escribir sobre un espectáculo que no se ha conseguido del todo?

“Por supuesto. Si yo escribo de un montaje que no ha cumplido con una serie de puntos específicos que yo considero que son vitales, claro, se enojan muchísimo. Pero es que hay un mecanismo perverso de por medio, porque existen fondos económicos nacionales para grupos y para artistas y uno de los requerimientos que exige la convocatoria de cada uno de estos concursos es que presenten notas de prensa. Entonces ellos buscan desesperadamente que escriban de ellos. Pero se enfrentan a que lo que escriben de ellos son notas informativas, no análisis sobre su trabajo, lo cual para ellos es un problema. Es algo tremebundo en tiempos donde la política es democratizar y se considera que todos tienen derecho a foro, porque vas a encontrarte con cosas que son penosas, de las cuales procuro no escribir”.

En el Festival “Un Desierto para la Danza” de Hermosillo, Sonora (2019), con la Primera Bailarina Laura Morelos y el coreógrafo Miguel Mancillas, una de las personalidades entrevistadas en el libro “Vida al Aire”.  Fotografía: Archivo personal de R. Manzanos (cortesía)

“A todos los interesados en ser críticos de danza les recomiendo, antes que nada, que estudien danza”, es lo que expresa cuando le pedimos una recomendación al respecto. “Pero una cosa es lo que tienes que saber y otra cosa es lo que vas a escribir. ¿Cómo lo vas a plasmar en una nota que es para un periódico o para una revista? Medios que la gente va a leer en la peluquería. O que mañana va a ser la publicación de ayer a utilizar hoy como envoltura en el mercado, yo qué sé. Si yo quiero que el lector me lea, entonces necesito un gancho para que así sea. Por eso el lenguaje periodístico es crucial”.

“Yo creo en el periodismo a capa y espada”, agrega. “Y creo que el ser un editorialista o dedicarte a la crítica requiere que entiendas cuál es el lenguaje periodístico y ceñirse a eso. Gabriel García Márquez decía [Rosario estudió también en la Escuela Internacional de Cine y Televisión (EICTV) de San Antonio de los Baños en Cuba, fundada por el Gabo] que es como una respiración y tú le vas a controlar la respiración al lector, le vas a decir aquí puedes respirar y aquí no. Creo que en la crítica no hay por qué ser aburrido ni tedioso, al contrario. Lo que ocurre es que, simplemente, se carecen de los elementos narrativos especializados del lenguaje periodístico”.

Con Pina Bausch, en Ludwigshafen, Alemania (2003), al finalizar una presentación de su coreografía “Masurca Fogo”. Fotografía: Archivo personal de R. Manzanos (cortesía)

Ya nos hemos despedido cuando Rosario parece tener la impresión de recordar algo y proclama, “insisto, tener un premio de carácter internacional me permite explicarles a mis compañeros, a mis colegas periodistas e incluso aquellos que les interesaría dedicarse a escribir sobre danza que sí es posible lograrlo. Que fuera de México, escribir sobre danza es considerado una categoría especial digna de ser reconocida”.

La presentación del libro “Vida al Aire” será el  viernes 11 de agosto a las 8 de la noche en el Miami Hispanic Cultural Arts Center (111 SW 5ta Avenida, Miami, Fl 33130). La entrada es gratis.  La Closing Gala of the Stars del IBFM tendrá lugar el domingo 13 de agosto a las 5 de la tarde en el Miami-Dade County Auditorium (2901 W Flagler St, Miami, FL 33135). El precio de admisión es de $35 a $65 y los boletos pueden aquirirse en https://www.ticketmaster.com/xxviii-international-ballet-festival-of-miami-closing-gala-of-stars/event/0D005EB8CB0CCA9C?refArtist=K8vZ917GDe7

Para más información sobre ambos eventos visite https://www.internationalballetfestival.org/

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