ALHAMBRA ORCHESTRA CIERRA 32DA TEMPORADA CON MOZART Y GRANT STILL

Alhambra Orchestra, dirigida por Daniel Andai. Fotografía: Charles Hyams (cortesía de Alhambra Orchestra)

Alhambra Orchestra, fundada en 1990 por el Dr. Leo Walz, es una activa institución comunitaria dedicada a poner la música “clásica” y la educación musical a disposición de la población multiétnica de Miami. Un trabajo incansable durante más de tres décadas lo demuestra. Su trigésimo segunda temporada culminará exitosamente con un gran concierto el domingo 15 de mayo, a las 7:30 p.m. en el Centro Wertheim de Artes Escénicas de la Universidad Internacional de la Florida (FIU).

Después de dos difíciles años en los que la agrupación no pudo materializar presentaciones convencionales en salas de conciertos, el anuncio de la conclusión de su temporada en el auditorio de FIU en un entorno íntimo y personal, es una realidad que inspira a todos y cada uno de los músicos que componen la orquesta comunitaria del condado Miami-Dade.

El concierto de cierre, de entrada gratuita, será un “finale” por todo lo alto, con dos emotivas piezas que aportarán con sus armonías una nota grandiosa, en una exploración de una pieza mozartiana clásica, y el renacimiento de otra injustamente olvidada que, sin embargo, constituye un hito histórico en la música sinfónica estadounidense.

“Este programa comienza con una obra fundamental de Mozart, donde se destacan dos magníficos músicos locales”, afirma Helen Ann Hauser, directora ejecutiva de Alhambra Orchestra, que se presentará bajo la batuta de su director artístico y conductor principal Daniel Andai, quien también se desempeña como profesor, violinista, y decano de la División de Música de la New World School of the Arts.

La obra a la que se refiere es la “Sinfonía concertante por violín, viola y orquesta en mi bemol mayor, K. 364”, de Mozart, creada por el gran compositor en 1779, durante un viaje por Europa que incluía a Mannheim y París, y considerada como el ejemplar más representativo de su género, que, como su nombre indica, está a medio camino entre la sinfonía y el concierto.

En cuanto a los solistas, Hauser tiene toda la razón. El violinista y director orquestal Scott Flavin, profesor de violín y música de cámara de la Facultad Frost de Música de la Universidad de Miami, es conductor residente del Instituto Henry Mancini, director musical de Miami Mozarteum y miembro del Cuarteto de Cuerdas Bergonzi.

Por su parte, el violista Michael Klotz es instructor principal y artista residente de viola y música de cámara de FIU, del Instituto Internacional de Música Heifetz, y asesor artístico y profesor del Festival Josef Gingold de Música de Cámara de Miami, además de violista del Cuarteto de Cuerdas Amernet, e instructor de viola de la New World Symphony.

La “Sinfonía concertante” ha ejercido gran influencia en numerosos arreglistas, así como en el mundo cinematográfico, utilizada parcialmente en películas como “El caso de Thomas Brown” (1968); “La decisión de Sofía” (1979); “Conspiración de mujeres” (1988) y “Amadeus” (1984), donde Milos Formas la incluye en la secuencia que muestra a Salieri leyendo amargamente partituras de Mozart.

En cuanto a la segunda obra que conforma el gran concierto, y que será interpretada por la orquesta en pleno, Hauser dice lo siguiente: “Con ella pasamos del Viejo Mundo al Nuevo, con una pieza que fue realmente popular en un momento, pero que no se ha escuchado recientemente en Miami”.

La directora ejecutiva de Alhambra Orchestra se refiere a la “Sinfonía número 1, Afro-American” de William Grant Still (1895-1978), a quien le corresponden varios méritos. Fue el primer afroamericano en dirigir una gran orquesta sinfónica estadounidense, el primero en conseguir que una de sus obras sinfónicas (precisamente la que se interpretará en el concierto) fuera interpretada por una gran orquesta, el primero en lograr que una de sus óperas fuera interpretada por una gran compañía, y el primero en conseguir que una de sus óperas se retransmitiera por la televisión nacional. No por azar lo consideran “el decano de los compositores afroamericanos”.

La obra, también conocida como “Afro-American Symphony” y “Sinfonía número 1 en la bemol mayor”, fue creada en 1930, estrenada en 1931 por la Orquesta Filarmónica de Rochester, y publicada en 1935. Esta partitura para orquesta, que incluye celesta, arpa y banjo tenor, combina una forma sinfónica bastante tradicional con progresiones de “blues”, “spirituals” y otros ritmos característicos de la música popular afroamericana de ese tiempo, con lo cual Still expresó con éxito la integración de la cultura negra a las formas clásicas. Sin dudas, una pieza histórica, que llena de orgullo a sus intérpretes.

‘Los miembros de Alhambra Orchestra han disfrutado enormemente el aprendizaje de esta sinfonía de William Grant Still, interpretada frecuentemente en las décadas posteriores a su creación y hasta 1950, que merece un renacimiento”, añade Hauser. “Es melódica, dinámica, jazzística y muy estadounidense. Estamos seguros de que al público le encantará escucharla”.

Alhambra Orchestra celebra la conclusión de su trigésimo segunda temporada con una nota jubilosa y esperanzadora, fiel a su razón de ser como una de las organizaciones musicales más antiguas de Miami: servir e inspirar a personas, familias y comunidades con experiencias accesibles, enriquecedoras e insuperables.

Alhambra Orchestra se presenta el domingo 15 de mayo a las 7:30 p.m. en FIU Wertheim Performing Arts Center (10910 SW 17th Street). Entrada gratuita y estacionamiento a precio módico. Los asistentes en grupos considerables, y las personas que necesitan atención especial deben hacer coordinaciones previas al concierto. Para más información, visite www.alhambraorchestra.org, llame al 305-668-9260, o envíe un mensaje a music@alhambraorchestra.org.

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