Las estrellas descienden en Miami para “La Boda de Aurora”

Las grandes obras artísticas del pasado llegan a nosotros acompañadas de un aura triunfal que nos hace creer que todo tiempo pasado fue mejor, que todo lo que hicieron los creadores de antes tenía el mismo nivel y que el camino recorrido por estos estuvo siempre lleno de apoyo financiero.

Cuando presenciamos “El Lago de los Cisnes” creemos que siempre ha tenido la eficacia comunicativa que hoy ostenta y cuando asistimos a una función de “La Bella Durmiente” es difícil imaginarnos que no haya sido siempre un éxito absoluto de público y crítica.

Con frecuencia, la historia es otra y “La Boda de Aurora”, la obra en un acto que este fin de semana presenta el Ballet Clásico Cubano de Miami (CCBM por sus siglas en inglés) es un buen ejemplo.

Esta pieza coreográfica es el plato fuerte del programa y ocupa la segunda parte de una oferta llena de atractivo concebida por CCBM para no defraudar los interesados en el ballet clásico, a los seguidores que esperan ansiosos su Gala anual y a los numerosos admiradores que tiene en Miami el estilo cubano.

“La Boda de Aurora” es en realidad el tercer acto del ballet “La Bella Durmiente” donde se presentan las festividades de la boda de la Princesa Aurora (la protagonista de la historia) con el Príncipe Désiré, pero su existencia como un trabajo independiente de unos 40 minutos de duración (el ballet completo dura tres horas) tiene su origen en una difícil y urgente toma de decisión presionada por una situación que en su momento parecía haber llegado a un callejón sin salida.

El estreno de “La Bella Durmiente” el 15 de enero de 1890 en el Teatro Mariinski de San Petersburgo  – con la italiana Carlotta Brianza en el papel de Aurora – fue recibido con agrado,  resultó ser el comienzo del reconocimiento de Tchaikovsky como el mejor compositor de ballet ruso y la coreografía de Petipa fue considerada como uno de sus trabajos más inspirados.

Su primera puesta en escena fuera de Rusia tuvo lugar seis años mas tarde en La Scala de Milán, también con Carlotta Brianza como Aurora y el primer montaje completo en los Estados Unidos data de 1937, pero es el montaje de 1921 en Londres el que nos interesa para nuestra historia.

En 1921, el famoso productor ruso Serge Diaghilev presentó en Londres una reposición de “La Bella Durmiente” con su compañía Los Ballets Rusos bajo el título de “La Princesa Durmiente” y encargó la puesta en escena a Nikolay Sergeyev. Fue una gran producción con escenografía y vestuario diseñados por Leon Bakst. La intención era ofrecer funciones durante seis meses alternando elencos diferentes pero tuvieron que retirarla de cartelera antes de tiempo por falta de público.

Diaghilev acabó marchándose de Londres lleno de deudas mientras el principal patrocinador de la fallida temporada tomaba medidas legales para quedarse con los decorados y los trajes del ballet. La situación era tan seria que Diaghilev tuvo incluso que dar un permiso de ausencia indefinido a todos sus bailarines por no tener manera de pagarles.

Pero había un problema aún mayor y este era que ya existía un contrato para llevar “La Princesa Durmiente” a la Ópera de París en mayo de 1922. Ante la imposibilidad de presentar el ballet completo, Diaghilev acordó ofrecer en su lugar su último acto bajo el título de “La Boda de Aurora”, reemplazando los diseños originales con escenarios y disfraces prestados (iniciando una práctica que todavía utilizan muchas compañías).

“La Princesa Durmiente” nunca volvió a ser presentada por Los Ballets Rusos y Diaghilev murió en 1929 pero “La Boda de Aurora” se ha mantenido hasta hoy como oferta de ocasión en compañías que buscan darle a su público algo de la magia de “La Bella Durmiente” sin tener que invertir en una puesta en escena completa.

En este contexto, los intérpretes de los papeles de la Princesa Aurora y el Príncipe Désiré son fundamentales para garantizar el éxito de la empresa. Son papeles que requieren bailarines estrellas y si algo define la Gala que presenta cada año CCBM por estas fechas es la participación de estrellas invitadas.

Eriberto Jiménez, el nuevo director artístico de CCBM tras el reciente fallecimiento de su fundador Pedro Pablo Peña, se muestra muy entusiasmando porque esta función “marcará el debut en Miami de la primera bailarina cubana Yolanda Correa, actualmente la principal figura del Ballet Nacional de Noruega, quien estará acompañada por Sterling Baca, primer bailarín del Pennsylvania Ballet”.

Sin duda alguna, esta es una oportunidad excelente para conocer a Correa, considerada por muchos como la bailarina cubana más destacada de su generación, en uno de los papeles por los que ha recibido mayor aclamación de público y crítica. Correa comenzó bailando con el Ballet Nacional de Cuba en el 2000 y alcanzó la categoría de Primera Bailarina en septiembre de 2009, abandonó Cuba en 2010 y tras un breve período en España se incorporó al Ballet Nacional de Noruega en otoño de ese mismo año.

Por su parte, Sterling Baca es un joven bailarín que sorprendió a todos cuando en el 2016 pasó de manera súbita de cuerpo de baile en el American Ballet Theatre a bailarín principal en el Pennsylvania Ballet (que ahora dirige Angel Corella) y llega a Miami precedido de los más entusiastas comentarios.

Esta es la primera vez que Correa y Baca van a bailar juntos.

“En esta función se va a incluir un homenaje a Pedro Pablo Peña con una selección de videos y música en vivo.  La música en vivo estará igualmente presente en ‘Lecuona Suite’ con acompañamiento de piano y después se va  a presentar el Pas de six del ballet ‘Esmeralda’. La primera parte del programa cierra con ‘Habaneras’ que fue el último ballet en el que Pedro trabajó”, explica Jiménez.

Y agrega, “también regresan a Miami para bailar con nosotros Gretel Batista y Francois Llorente. Gretel es ahora Bailarina Principal del Dance Alive National Ballet en Gainesville y Francois, que estoy seguro el público de Miami recuerda por su actuación en el festival del año pasado, se encuentra en Sarasota”.

Definitivamente, las estrellas descienden en Miami para “La Boda de Aurora”.

La Gala Anual del Ballet Clásico Cubano de Miami” con “Las Bodas de Aurora” se presentará el sábado 9 de junio a las 8:00 de la noche en el Miami-Dade County Auditorium, 2901 W Flagler St, Miami, FL 33135. Las entradas – entre $32 y $62 – pueden comprarse en Ticketmaster.com, llamando al (303) 547-5414 y en el propio teatro. El estacionamiento es gratis.